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La Aurora (Madrid)

Revistas infantiles
Publicación dirigida a los niños y a los jóvenes de carácter didáctico moral que formó parte de la eclosión de este tipo de periódicos que se produjo a partir de la década de 1840, una vez asentado el régimen liberal en España y su política alfabetizadora y de escolarización. La Aurora estaba dirigida por Joaquín Avendaño y Mariano Carderera, profesores de Escuela Normal, inspectores de Enseñanza Primaria y autores de un buen número de libros de texto y pedagogía, según podemos leer en un artículo de Antonio Viñao en la Historia de la edición en España, 1836-1936. Con 32 páginas y periodicidad mensual, la publicación de ideario conservador, cuyo lema era Virtud, Ciencia y Trabajo, contaba con algunos grabados a página entera que hacían más atractiva su lectura para los niños. Así, en el tercer número de la publicación y acompañando un reportaje sobre los inicios del ferrocarril en España, podemos ver un grabado de lo que fue la primera estación de Atocha, el embarcadero o estación de Madrid, como se llamaba entonces, con un tren echando humo a punto de salir para Aranjuez. En su primer número, el grabado de un globo aerostático levantando en el aire a un hombre subido a un caballo ilustra una instructiva conversación entre un padre y un hijo que tiene visos de reportaje de actualidad y que sirve para reivindicar a un pionero español de la aviación apenas conocido. El padre explica al hijo que quizá en el futuro los globos servirán para viajar de un punto a otro, lo que no se podía entonces porque no se había descubierto el modo de darles dirección. Y le informa de que un español, Pedro de Montemayor, está construyendo un aparato al que llama Eolo y que resuelve este problema. Quien tenga curiosidad por este personaje y su invención puede consultar on line una obra contemporánea del periódico, la Enciclopedia moderna, volumen tercero, de 1851, donde se lee que Pedro de Montemayor, visionario abogado y vecino de Medina-Sidonia, llegó a escribir a la reina Isabel II para pedirle financiación para su Eolo, con el que se comprometía a hacer en diez horas el trayecto Cádiz-Madrid y aterrizar en un balcón de palacio. El tono y la orientación pedagógica de La Aurora se ponían de relieve con una sección fija de Ejercicios en las últimas páginas, con análisis de Gramática y problemas de Aritmética para que los niños los resolvieran, publicándose el nombre de aquellos que enviaban la solución al periódico. [Descripción publicada el 15/03/2019]