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El Fomento (Barcelona)

Imparcial (Barcelona) || Verdad (Barcelona) || Sol (Barcelona)
Periódicos anteriores a 1850
Surge este diario como fruto de la fusión de los liberales El Imparcial (1842-1844) y La Verdad (1843-1844). Señala Jordi Casassas i Ymbert (2005) que fue uno de los intentos de formar un portavoz unitario del pensamiento liberal conservador, todavía disperso, y al margen del Diario de Barcelona. Se definía como moderado y católico monárquico, pero incluyendo también algunos elementos progresistas. Así, en su primer número, del uno de enero de 1845, proclama que “combatiremos la revolución como la reacción” y que “el orden público y la paz interior de los pueblos forman nuestra principal divisa, que defenderemos a todo trance”. Pretendió fomentar los intereses prácticos y condenar sin miramientos los motines y rebeliones contra el Gobierno, por lo que fue el portavoz de los moderados gubernamentales en torno a la Unión Liberal en el poder. Con el subtítulo “diario político, literario, mercantil e industrial” estuvo dirigido por el abogado y periodista Francesc Carles i Gabarró (-1874), y en su redacción y como colaboradores estuvieron elementos del liberalismo regionalista que confluiría en La Renaixença, como el también abogado, periodista y escritor Víctor Balaguer (1824-1901), Adolf Blanch y Cortada (1832-1887), el arqueólogo y bibliotecario Antoni de Bofarull (1821-1892), Lluís Cutxet -o Cutchet- (1815-1892), Vicenç Madera, Jaume Llansó, Llorenç Puig i Boada, Francesc Oliver, Manuela Cambronero o R.L. Fuentes. Su editor responsable, que lo venía siendo de El Imparcial, será Josep Devesa i Pujadas, en cuya imprenta se encontraba también la redacción, en el número seis de la calle Serra. Mantiene el formato y diseño del citado diario, por lo que las entregas de El Fomento serán en gran folio y en pliego de cuatro páginas, compuestas a cuatro columnas. Sus secciones serán igualmente las mismas: Parte editorial, Crónica oficial (legislación y normativa), Crónica extranjera, Crónica interior (noticias de España), Cortes o crónica parlamentaria, Boletín urbano o Gacetilla de la capital, Boletín de comercio o Revista comercial, Comunicados, Remitidos o Correspondencia (artículos y cartas al director o editor), Diversiones públicas (programación teatral), Crónica teatral, Funciones religiosas, Avisos particulares y anuncios comerciales, que irán aumentando considerablemente. También publica un folletín en los faldones de la tercera y cuarta planas. En mayo de 1845 regalará la nueva Constitución, que sustituyó a la consensuada entre progresistas y moderados de 1837, y durante 1849 mantendrá una polémica con Antoni Brussi, propietario de Diario de Barcelona, por edificar abusivamente en la calle Librería. El último número de El Fomento en la colección de la Biblioteca Nacional de España corresponde al 25 de diciembre de 1849. Dos días después aparece en su lugar el El Sol, con una tendencia liberal similar, y considerado el diario de mayor formato en toda España, que estará publicándose hasta el 21 de julio de 1852. El Sol también será sustituido por Diario de Cataluña (1852-1853) y éste a su vez por Diario de la tarde (1853-1854). Referencia bibliográfica para estos diarios también en: 200 anys de premsa diària a Catalunya (1995).