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Música (Barcelona. 1938)

Música
Revista mensual, editada por el Consejo Central de la Música, organismo de la Dirección General de Bellas Artes, dependiente del Ministerio de Instrucción Pública, y publicada en Barcelona, desde enero a junio de 1938. “Supuso un intento de enorme magnitud –¡increíble en 1938!– por mantener en activo la vida musical del país”, representando, al mismo tiempo “un experimento cultural, impregnado, naturalmente, del espíritu revolucionario de aquel entonces”, siendo, en fin, “un ejemplo muy representativo de la vitalidad de la cultura española, incluso en los trágicos años de la guerra”, tal como concluye Francisco Caudet en su trabajo sobre esta revista publicado en 1976. El citado consejo –cuyo precedente es la Junta Nacional de Música y Teatros Líricos de 1931– había sido creado por orden ministerial del 24 de julio de 1937, y se había trasladado a Barcelona junto al Gobierno republicano, en octubre de ese año. Empezó siendo presidido por quien era el director general de Bellas Artes, Josep Renau (1907-1982), quien publicará en la primera entrega de la revista un editorial bajo el epígrafe Misión del Consejo General de la Música, que constituye un análisis esencial de la situación del arte musical en España. El vicepresidente era Salvador Bacarisse (1898-1963) y vocales, los también compositores españoles Eduardo Martínez Torner (1888-1955), una de las más altas instituciones en el folclore español; Robert Gerhard (1896-1970), el miembro más activo de la sección hispano-catalana; Julián Bautista (1901-1961), Francisco Gil Gallego y Rodolfo Halffter (1900-1987), que comenzó siendo su secretario y aparecerá como director de la publicación en su entrega doble de mayo-junio (número 5). Secretario del consejo será José Castro Escudero y vicesecretario, Manuel Lazaredo de la Mata. Como administrador de la revista se indica a Antonio Miguel. Muchos de ellos formaron parte de la Alianza de Intelectuales Antifascistas para la Defensa de la Cultura y del Grupo de los Ocho, equivalente musical de la Generación del 27. La colección de este título en la Biblioteca Nacional de España la integran los números 3 (marzo), 4 (abril) y 5 (mayo-junio), siendo este doble y, probablemente, el último. Sus entregas tienen entre setenta y un centenar de páginas, compuestas a una y dos columnas, y con cubierta y sumario. Sus contenidos abordan muy diversos aspectos de la música. Así, Martínez Torner, escribirá sobre su relación con la literatura y la filología; Bautista, sobre la producción sinfónica; Luis Góngora, el titulado la Función social de la música: la Orquesta Nacional de Conciertos, que incluye el fotograbado con el retrato de quien fue su primer director, Bartolomé Pérez Casas; o Castro Escudero, sobre las ediciones del propio consejo. Además, Otto Mayer escribe sobre la sociología de la música; Manuel Borgunyó sobre la organización de la pedagogía musical escolar; José Subirá, unos apuntes históricos bajo el epígrafe La música en el teatro barcelonés, y un artículo titulado En memoria de Enrique Granados, con dibujos y cartas inéditas del compositor y pianista catalán; Rafael Moragas, un Epistolario inédito de Isaac Albéniz; Jesús A. Ribó, un esbozo bio-bibliográfico sobre el compositor y musicólogo Felipe Pedrell; o Arnaud (desde París), sobre la radio como nuevo modo de expresión. El pintor y pedagogo Francisco Galí Fabra (1880-1965), que será también nombrado director general de Bellas Artes, escribirá en su entrega número 4 un artículo bajo el epígrafe 1850-1939. Tiene también secciones, como Vida Musical, en la que Thomas Garland, escribe desde Londres; Noticias breves, referidas no solo a la actividad musical en España, sino también en el extranjero: Varsovia, Ámsterdam, Hollywood, Nueva York, México, La Habana, Moscú o París; de Bibliografía, y Resúmenes en francés e inglés. También Música y músicos españoles en el extranjero; Revistas, Necrología o Concursos. Con cada entrega publica también un Suplemento, con partituras musicales, que representan “primicias”, como es la del joven compositor Gustavo Durán, con letra de Rafael Alberti (Si me fuera, amante mía…), del citado Rodolfo Halffter (Danza de Ávila) o con textos de Federico García Lorca. Otro de los aspectos destacadísimos de esta publicación son las ilustraciones son los dibujos de Ramón Gaya o las viñetas dibujadas por Alma Tapia. Marco Antonio de la Ossa Martínez (2014) señala que esta revista es una “publicación clave para estudiar y conocer el estado y la importancia de la música culta durante la guerra civil en el bando republicano, y uno de los máximos referentes en la edición española”. Además de las citadas, otras referencias a este título son las de Ramón Safón (1978), Campillo y Centelles (1979), María Ester-Sala (1989), Torres Mulas (1991), Leticia Sánchez de Andrés (2013), y del citado Ossa Martínez (2010 y 2011), entre otras. Rodolfo Halffter publicaría después en México la revista Nuestra música (1946), con reminiscencias sobre esta publicación republicana.