Publicación con el subtítulo “semanario de las mujeres españolas” que pretende ser el de “todas las mujeres cristianas y patriotas”, de extrema derecha, monárquico y con un marcado ánimo propagandista y de movilización contra los partidos republicanos tras reconocer la Constitución de 1931 su derecho al sufragio universal por vez primera en España. Aunque sus páginas acogen contenidos propios de los magazines, de moda, decoración y cocina, su naturaleza es eminentemente doctrinaria y política.
En sus primeros números aparece en la cabecera José María Pemán (1897-1981) como director, quien en el artículo de presentación del semanario, señala que aparece en un “momento trágico” de la historia de España, bajo el signo de la tradición, la religión, la patria y la familia. Su carácter antifeminista también lo advierte el escritor, al señalar que “la mujer española ni se ha esforzado ni ha luchado por el voto”, sino que “se lo ha encontrado”.
También incluye entrevistas, biografías, reportajes y artículos sobre teatro, cine, consumo, deportes, religión, con una sección dedicada exclusivamente a la apologética, cuentos y poemas. Su primera página siempre está dedicada al artículo doctrinal, firmado por Pemán, Víctor Pradera (1873-1936) o el Marqués de Lozoya (1893-1978), y los de política ocupan un gran espacio en la publicación, que hasta las elecciones de noviembre de 1933 es afín a la CEDA. Lanzará diferentes campañas a favor de la amnistía de los presos tras la sanjurjada de agosto de 1932 y contra la enseñanza laica y los maestros de izquierdas, y ejemplo de esta es el artículo que escribe posteriormente el arzobispo de Toledo Isidro Gomá (1869-1940) titulado “La escuela laica es atea, inmoral, antisocial”.
Entre sus redactores y colaboradores estarán los que ya escriben en Acción Española (1931-1937), y además de los ya citados se encuentran Pedro Sainz Rodríguez (1897-1986), Miguel Herrero García (1895-1961), Joaquín Arrarás Iribarren (1898-1975), Aureliano López Becerra (1880-1956), Félix de Llanos y Toriglia, Luis Lucia, Pedro Martín Artiñano, Honorato Maura, Fernando Bertrán, Juan José de Madariaga, Jenaro Xavier Vallejos y Ramiro G. de Dulanto, además del duque de Maura, el conde de Vallellano y el marqués de Saltillo.
Destaca en una publicación dirigida a mujeres la participación y colaboración de Blanca de los Ríos Lampérez (1862-1956); María López Sagredo, dirigente de Defensa Femenina; la ingeniero industrial católico-monárquica Pilar Careaga (1908-1993); Teresa Luzatti, de Juventud Católica Femenina; la redactora y propagandista de Acción Nacional, Pilar Velasco Aranaz, así como María Rosa Urraca Pastor, María de Madariaga, Cristina de Arteaga, la doctora Rosario Rodríguez, Francisca Bohigas, María San José, Clara Frías y Honorata Maura.
Ellas propaga el ideario y las actividades de organizaciones como Acción Católica, Acción Popular, Juventud Católica Femenina de España, la Unión de Damas y Escuelas Católicas, y su difusión fue dirigida a las mujeres de clase alta y acomodada. Asimismo estuvo vinculada a la emisora Radio España.
De 16 páginas, está ilustrada con fotografías y dibujos de María Luisa Pérez Herrero, Rafael Fernández Cuevas y Manuel Pedrós. Sus artífices también utilizaron seudónimos, como El magistral de Burgos, Boy, Gil Bare, Curro Vargas y Oscar. Pemán en sus artículos propagó la política del fascismo italiano y la persecución de los judíos del régimen hitleriano alemán. No sufrió la suspensión tras la intentona golpista de agosto de 1932 y se publicó hasta 1935.