El Grupo Z, presidido por Antonio Asensio Pizarro (1947-2001), lanza este semanario el nueve de junio de 1987, como un modelo híbrido que ofrece la información general de las revistas políticas, sumándole los grandes reportajes y entrevistas y, también, los aspectos frívolos de la vida social y cultural, es decir con un carácter amable y alejado de lo escandaloso, por lo que el objetivo de sus artífices fue destinarla a todo tipo de lectores. Este grupo editor añadió a la quincena de títulos periodísticos que ya publicaba, esta cuarta revista, que se sumaba a la más audaz Interviú (1976), la más seria y política Tiempo (1982) o la especializada Dinero (1982). Siendo vicepresidente del grupo José Luis Erviti y director general de publicaciones Julián Lago, el primer director de Panorama fue Juan Fermín Vílchez (1949-) y sus subdirectores, Francisco Pérez Abellán (de información), y Juan Antonio Galván (de edición y cierre); director de fotografía, César Lucas, a cuya sección se incorpora también Paco Elvira, entre otros fotógrafos; redactor-jefe, Jesús de las Heras; al frente de cultura y sociedad se puso a Julio Fernández Rodríguez y María Eugenia Yagüe; y en internacional, a Manuel Romero, que también escribirá sobre moda. Incorpora firmas como las de José Luis Sampedro, Manuel Leguineche, Javier Martínez Reverte, Fernando Díaz Plaja o la de Fernando Álvarez de Miranda, y entre sus principales colaboradores y columnistas estuvieron Consuelo Álvarez de Toledo (política), Carmen Baztán (economía), Carlos Tena (música), Jesús Mariñas (sociedad), Mercedes Arancibía (libros) y Juan Villarín, Karmele Marchante o Isabel Zúñiga, entre otros, teniendo además corresponsales en Cataluña o el País Vasco, así como en Londres, Roma o Nueva York, lo que le facilitó la publicación de reportajes internacionales.
Panorama es un magazín de espíritu europeo, con entregas que superan ampliamente el centenar de páginas, y cuya primera portada fue ocupada por la fotografía de un encuentro entre el escritor y hoy Premio Nobel Mario Vargas Llosa y el entonces presidente del Gobierno español, el socialista Felipe González. Sus contenidos fueron agrupados al principio en tres grandes secciones: Gente, El arte de vivir (moda, libros, música o cine) y Televisión, y también, al final, pasatiempos. Así en su primer apartado publica entrevistas realizadas por unos personajes a otros, como es el caso de la que hace Ana Obregón al entonces ministro de Defensa, Narcís Serra, o la de Norma Duval al ministro del Interior, José Barrionuevo. Pero la “gente” o personajes que desfilan por sus páginas, a través de reportajes, crónicas, entrevistas, columnas o noticias breves van desde Diana de Gales a Juan Pablo II, pasando por Carmen Rossi, Andrés Segovia, Charo López, José Sacristán o Margaret Thatcher, es decir todos aquéllos que, desde diferentes ámbitos sociales, políticos, periodísticos, artísticos o culturales, marcaban actualidad. También inicia una serie bajo el título “24 horas con”, con personajes como José María García o Pedro Ruiz, o publica cada semana una historieta con los personajes de la serie Spitting.
Muy pronto, Vílchez estaría acompañado de Manuel Colomina, como director adjunto, y por los subdirectores Manuel Romero y Juan Antonio Galván. Pero a los seis meses de la salida de la revista -a mediados de enero de 1988-, el propio Vílchez sería sustituido como director por el periodista televisivo Alfredo Amestoy. Ese mismo año, Amestoy es sustituido por Manuel Romero, que estuvo acompañado por Fernando Múgica como subdirector, hasta que éste es reemplazado, en 1989, por José Luis del Moral. En 1990, es nombrado nuevo director: Carlos E. Rodríguez, que mantuvo a Del Moral en la subdirección, pero compartida esta con Ángel A. Vico. Ese mismo año tomará las riendas de Panorama el periodista Carlos Carnicero, siguiendo Vico como director adjunto, e Ignacio Ruiz como redactor-jefe.
Durante sus seis años de vida, media decena de periodistas fueron puestos al frente de una publicación en busca de una adaptación que le recolocara en cada momento en el mercado de las revistas semanales. Barrera (1995) señala que durante este periodo en las revistas españolas de información general predominó el reportaje de escándalo, la crónica de sociedad, protagonizada por personajes famosos del entretenimiento, el espectáculo y la farándula, de los deportes, la moda, el ocio o los toros, que conformaron lo que se denominó la jet set, y los contenidos ligeros o superficiales, junto a otros sobre viajes o salud. Revistas que buscaron una fórmula más para entretener que para ofrecer un análisis profundo y serio de la realidad.
Panorama edita su número 327 y último, el 30 de agosto de 1993, cuyo ejemplar ya costaba 495 pesetas (el del primero fue de 225), cuando Carnicero tiene como director adjunto a Juan Carlos Algañaraz; director de información, a Ignacio Ruiz; jefes de área, a Pedro Barbadillo (reportajes) y Lucía Huélamo (cultura, sociedad y espectáculos); y jefe de fotografía, a Miguel M. Colina. Entre sus firmas, aparecían entonces las de Pedro Calvo Hernando, Julio Caro Baroja, Carlos Luis Álvarez (Cándido), Fernando Jáuregui, Julia Navarro, José Luis Cuerda, Antonio de Senillosa, Fermín Bocos, José Luis de Villalonga o Carmen Posadas. Y entre sus secciones contaba con Cartas de los lectores y Carta del director.
El motivo del grupo editor para su cierre fue la crisis publicitaria de ese año y la saturación del mercado de las revistas de información general, cuando se editaban hasta ocho para un techo de 200.000 lectores. En el momento de su cierre, Panorama tenía una venta media en torno a los 52.000 ejemplares, cuando algunos de sus números especiales habían alcanzado hasta los 300.000, ya que fue la pionera en introducir promociones (vídeos, etc.). Ese mismo año la difusión de Interviú fue de 167.191 ejemplares, y de Tiempo, 161.899, las otras dos grandes revistas del mismo Grupo Z. Por su parte, la difusión de Cambio 16 (1971) fue de 93.085 ejemplares, y la de la conservadora Época (1985) de 69.007 ejemplares. Otras revistas que se publican durante este periodo fueron El Globo (1987), del Grupo Prisa; Tribuna (1988), fundada por Julián Lago al abandonar el Grupo Z, y El Siglo (1991), del Grupo Nuevo Lunes.