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Almanaque de las hijas de Eva

Almanaques || Revistas femeninas
De este almanaque la Biblioteca Nacional posee los correspondientes a los tres últimos años de la década de 1860 -todos ellos con un total de 68 páginas- que con toda probabilidad son los únicos que se editaron. La publicación estaba escrita, según leemos en la portada, ‘Por Una Porción de Adanes’, lo que ya da una idea del tono satírico-cómico de su contenido. En cuanto a su nombre, en 1862 se había estrenado la zarzuela Las hijas de Eva, obra en tres actos y en verso original de Luis Mariano de Larra con música de Joaquín Gaztambide. Se trata de una comedia de enredo amoroso ambientada en el siglo XVII que tuvo gran éxito y fue representada durante toda esa década. De ahí podría haber tomado el título este jocoso almanaque que iba dirigido muy especialmente a las mujeres. Ya el amplio subtítulo de su primer número, el del año 1867, daba una idea bastante aproximada de lo que se podía encontrar en su interior: ‘Contiene: santoral, juicio del año, artículos humorísticos, artículos de viaje, poesías, epigramas, cuentos, historias, anécdotas, profecías, secretos de tocador y muchas otras cosas. Contiene, además, el arte de conservar la hermosura, recetas útiles y gran número de grabados intercalados en el texto’ Efectivamente, los grabados son una de las principales características que dan valor a este almanaque. Los dibujos chistosos y las caricaturas son de una gran calidad. Solo ocasionalmente están firmados. El dibujante que más aparece es Ortego. Francisco Ortego fue pintor, además de humorista gráfico, e ilustró numerosas novelas además de publicaciones periódicas. El mismo año en que comenzó a editarse este almanaque Ortego trabajaba para El Museo Universal, revista de la editorial y librería Gaspar y Roig que también debía editar el Almanaque de Las hijas de Eva. A la muerte de Ortego en 1881, esta editorial publicó un álbum con una antología de sus dibujos. En El Museo Universal trabajaron también dibujantes que firman algunos grabados del almanaque como Bernardo Rico y Enrique Laporta. Igualmente, colaboraron en la revista los hermanos Bécquer, aunque se desconoce si participaron en los dibujos o los textos del almanaque. Estos últimos no aparecen nunca firmados. Gustavo Adolfo era el director literario de la revista. La única publicidad con la que contaba el almanaque era la de sus editores Gaspar y Roig, que anunciaban El Museo Universal además de la amplia oferta de su librería, una de las principales del Madrid de la época. En 1869, tras la llamada ‘revolución gloriosa’ del año anterior que derrocó a Isabel II, El Museo Universal dejó de editarse para dar paso a La ilustración española y americana, la gran revista gráfica de las últimas décadas del siglo XX y primeras del XX. Esta es probablemente la razón por la que también dejara de editarse el cómico Almanaque de las hijas de Eva. [Descripción publicada el 17/08/2022]