Fundado por el periodista y académico Luis María Anson (1935), aparece el primer número de este matutino el cinco de noviembre de 1998, como un “clon” del veterano diario ABC, con similar diseño y estructura formal y el mismo carácter político e ideológico: monárquico, católico y conservador. Previamente, Guillermo Luca de Tena había rechazado la idea de su creación como vespertino, propuesto por quien había sido el segundo director más longevo de su periódico durante casi quince años, desde 1983 a 1997, cuyas discrepancias y tensión produjeron que este abandonara definitivamente Prensa Española a la vez que, tras el fallecimiento del empresario mejicano de la comunicación Emilio Azcárraga Milmo, quedaba también truncada la posibilidad de su salida a través de Televisa (que ya había invertido en Radio España y Vía Digital), de la que el mismo Anson, asimismo, era su representante en España, cuya idea era convertirlo en cabecera de un gran grupo mediático y pretender emular así la faena que una década antes había protagonizado Pedro J. Ramírez tras su salida de Diario 16 y la fundación de El Mundo.
Para su publicación, un 25 por ciento de las acciones de la empresa propietaria de La Razón –Audiovisal Española- y su gestión editorial quedó mayoritariamente en manos del Grupo Z, de Antonio Asensio, que así pudo contar, tras su intento fallido en la década anterior, con un diario madrileño de referencia nacional, aunque este fuese ahora de derechas; otro 25 por ciento pertenecía a José Frade (también accionista entonces de Antena 3 TV), y los asimismo empresarios Enrique Cerezo, Rafael Anson (hermano del fundador) y Ramiro Garza Cantú, sumarían un 10 por ciento cada uno de las acciones, aunque la mayoría la tendrían indirectamente este empresario energético mejicano y el propio Luis María Anson.
Entre los principios fundacionales de La Razón, subtitulado “diario independiente de información general”, se encuentra la defensa de la “unidad de la nación española”, frente a los “nacionalismos decimonónicos y voraces”; también dice ser laico y no confesional, pero se compromete a mostrar una “atención preferente a la religión mayoritaria de los españoles” (la católica). El periódico lanzado por quien había sido miembro del Consejo Privado de don Juan de Borbón, conde Barcelona, se dice también defensor de la monarquía, como “institución que ha hecho posible la conciliación y la concordia de los españoles”, y asimismo se define como “liberal”. Anson traslada también a este diario las mismas estrategias que había mantenido como director de ABC, y que tanto éxito le dio, entre ellas, la confección de una primera página de tinte sensacionalista y con fotomontajes.
Dada su similitud, este diario se considerará una escisión del ABC, y su salida fue efusivamente saludada por Pedro J. Ramírez desde El Mundo, y a la misma, Anson, que no será su director sino el presidente de su empresa editora, se llevará a destacados periodistas del diario de Prensa Española, a la que acusará de “vieja” empresa, a la vez que llamará a su periódico como el “ABC verdadero”, irrumpiendo de forma frontal una competencia directa y un encarnizado enfrentamiento entre ambos periódicos por mantener o conseguir, respectivamente, un mismo sector de lectores, pero también otro que afectaba a toda la prensa española, al salir La Razón con un precio de venta inferior. Entre los periodistas y colaboradores que abandonan ABC para pasarse a La Razón se encontraron el que iba a ser el primer director de este último, Joaquín Vila, y José Antonio Vera, que lo sucederá desde el 28 de julio de 2000 hasta enero de 2005; así como, entre otros, Tomás Cuesta, como director de Publicaciones; Blanca Berasategui, que cambió la dirección de ABC Cultural por la de El Cultural del nuevo periódico, o el dramaturgo Francisco Nieva, como articulista de su tercera página.
En 2001, mientras que el diario ABC pasa a engrosar el grupo vasco Vocento, accionista también de Telecinco, se producirá asimismo el cambio accionarial en Audiovisual Española, con la salida del Grupo Z y la entrada de Planeta, que a sus casi sesenta años de vida se había convertido en un grupo editor multinacional, iniciando así una destacada incursión en los medios de comunicación (hasta entonces había sido residual su participación en Radio España o Telecinco), con su entrada mayoritaria en el capital de La Razón, que, el 30 de abril de 2003, ampliará, con la compra a Telefónica del 25 por ciento de las acciones de Antena 3 Televisión y su filial Onda Cero, o la revista Lecturas, así como, posteriormente, La Sexta, cuando la crisis de 2008, afecte financieramente a las cadenas de televisión españolas.
El catorce de febrero de 2006 y tras la adquisición por parte de Planeta y el Grupo Godó de un 40 por ciento de las acciones del periódico republicano catalán Avui, se había producido la salida de Anson de La Razón (aunque continuará publicando por algún tiempo su sección Canela fina), hecho que el mismo fundador del diario de militancia monárquica, católica y muy conservadora señala que le había producido un “grave problema de conciencia” y “una contradicción insalvable”. Anson se incorporará entonces al también muy derechista Grupo Intereconomía, como presidente de su consejo editorial, del que también saldrá malparado, para, en 2005, iniciar sus colaboraciones en El Mundo y, en 2008, lanzar la cabecera El imparcial en Internet.
Entre los columnistas de La Razón se encuentran Antonio Pérez Henares (Chani), César Vidal, José Luis Martín Prieto, Carlos Rodríguez Braun, Javier González Ferrari, José Antonio Álvarez Gundín, Alfonso Merlos, Alfredo Semprún, así como, entre otros, Carmen Gurruchaga, que se incorporó en 2002, procedente de El Mundo, o Alfonso Ussía, que lo hace en 2004, tras publicar su artículo El cerdo vasco en ABC, en donde había permanecido durante las dos últimas décadas. El diario también lanza ediciones regionales y locales en Cataluña, Valencia, Castilla y León, Andalucía y Sevilla, o Murcia; y suplementos como El Dominical, Magazine o el ya citado El Cultural.
Si en el año 2000, La Razón había alcanzado ya los 100.000 ejemplares de venta, tres años después su directo competidor –ABC- había perdido el segundo puesto de difusión de la prensa de referencia nacional a favor de El Mundo, continuando su caída de ventas hasta 2008, periodo en el que Federico Jiménez los Santos, a través de su micrófono en la cadena COPE, había llevado a cabo una campaña de desprestigio del vetusto periódico en manos de Vocento. Es en este año cuando ABC (con una difusión media diaria de 238.914 ejemplares) ficha a parte del grupo directivo de La Razón (con 156.033 ejemplares de media), en concreto a su director desde enero de 2005, José Alejandro Vara, y a su subdirector, José Antonio Navas. Por su parte, en febrero de ese año, Francisco Marhuenda (1961), que después de haber sido director de Gabinete (1996-1997) y director general de Relaciones con las Cortes a las órdenes del entonces ministro Mariano Rajoy, había pasado, en 2001, a dirigir la edición catalana de La Razón, será nombrado director del diario monárquico de Planeta, siendo puesto sin fisuras a favor del Partido Popular y del Gobierno Rajoy, tras ganar éste las elecciones de 2011, al mismo tiempo que continuará su ácida oposición no sólo contra los partidos de la izquierda, sino contra los movimientos sociales de protesta, llegando a ser denunciado por la manipulación de las fotografías de sus polémicas portadas.
Año 2010 donado por Intedoc (2018)
Entre el 20 de marzo y el 5 de junio de 2020 depositaron algunos ejemplares de la edición nacional de La Razón, debido al confinamiento por la COVID-19.
[Descripción modificada el 24/04/2022]