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Museo criminal

Sucesos
Publicación de las que son consideradas especializadas en “sucesos”, que al aparecer, el uno de enero de 1904, se autoproclama como “revista única en España” de su género, y que, además de ofrecer una Crónica del crimen (sucesos de actualidad), insertará textos sobre la tipificación de los delitos, los sistemas policiales y de prisiones, asuntos judiciales e, incluso, de doctrina criminalística, medicina legal y ciencia penal, tanto de ámbito nacional como internacional, como es el caso de la policía de los zares Estará dirigida al “gran público”, pero también a los funcionarios de la Guardia Civil, Carabineros, Judicatura y tropa del Ejército, cuyas suscripciones serán más ventajosas. Se editará en números quincenales, apareciendo los días uno y quince de cada mes, en entregas de ocho páginas, junto a otras ocho o doce con novelas ilustradas por entregas y encuadernables del mismo género, como la titulada La justicia de los gitanos, ilustrada con dibujos de Meléndez. Insertará otros grabados y fotograbados acompañando a sus textos, tanto de retratos (de delincuentes, miembros de la Guardia Civil, etc.) como de dibujos y reproducciones artísticas (batallas, crímenes históricos, etc.), siendo su subtítulo “revista ilustrada”. “Misterios de la Inquisición” será una de las secciones habituales de esta publicación, en cuyas páginas dedicará especial atención al anarquismo, publicando retratos de sus activistas, y de los servicios de la Guardia Civil, apareciendo también textos dedicados al bandolerismo o a la pena de muerte, a episodios heroicos de la Benemérita, a confeccionar un diccionario de caló o a catástrofes naturales. Cuando en julio de 1908 aumente su paginación, a 12 y 16 páginas, dejará de editar el encuadernable y en su lugar insertará también relatos históricos novelados y dramatizados. Su última página la dedica a insertar anuncios comerciales. También organizará entre sus suscriptores sorteos de regalos y concursos. En su número 135, correspondiente a su sexto año en publicación y de fecha 15 de agosto de 1909, en el que dará cuenta de los acontecimientos bélicos en Marruecos, acompañados de fotografías, anuncia su cese, pasando sus suscriptores a recibir en su lugar la revista El mundo militar (1908-1919), de cuya empresa editorial había entrado a formar parte.