Título de la revista especializada en propiedad industrial que fundó, dirigió y editó, desde abril de 1931, Guillermo Roeb, hijo del alemán José Roeb y Nohr, vinculado a España desde 1900 como catedrático de alemán de la Escuela Superior de Guerra y como fundador de la agencia de patentes y posterior Oficina Técnica de Propiedad Industrial Roeb y Compañía, con sede en Madrid y delegaciones en Barcelona y Bilbao. Sus contenidos se refieren también a métodos de comercialización y a marcas, productos y maquinaria novedosa. Era difundida gratuitamente entre industriales, comerciantes y profesionales, y alcanzó los 10.000 ejemplares de tirada.
Sus entregas fueron al principio mensuales y durante 1933 lo serán trimestrales. Lo fueron entre las 24 y las 36 páginas por número, con una cubierta estampada en diversas tintas, y con inserciones publicitarias a través de las cuales era financiada su edición. Su finalidad era la divulgación de la propiedad industrial y a la vez ser vehículo de propaganda útil de la labor que desarrollaba la compañía Roeb.
Compuesta a dos columnas y con profusión de fotografías y dibujos, sus textos están referidos también a la exportación, a la importancia de las marcas o a las técnicas del escaparate, a ofertas y explotación de las patentes españolas, a la ciencia del viajante o a la importancia de la publicidad. Entre sus secciones tiene una dedicada a Galería de hombres célebres y otra a Correspondencia, dedicada esta a las consultas de sus suscriptores. El último número de la colección de la Biblioteca Nacional de España corresponde al año 1934, sin concretar más, en el que se da cuenta del fallecimiento de José Roeb. Tras la correspondiente depuración profesional, su hijo Guillermo será nombrado en 1940 por el ministro de Industria y Comercio, presidente de la Junta Directiva del Colegio de Agentes de la Propiedad Intelectual.